Los dos gigantes de la informática,
Microsoft y
Apple, parece que no pierden el tiempo en cuanto a desarrollo de dispositivos y aplicaciones se refiere. Esta semana nos hemos encontrado con novedades importantes en el sector informático que podrían suponer un cambio de rumbo en el sector.
La primera en anunciar novedades ha sido
Apple, con la presentación por todo lo alto de su
iPad mini y el nuevo modelo de
iMac. El primer dispositivo no supone una auténtica revolución, ya que no es más que un
iPad de tamaño reducido con un ligero cambio en su estilo y un nuevo conector como el que utiliza el último
iPhone 5. Está por ver si su precio de
329 euros supondrá una dura competencia frente a otras
tablets del mismo tamaño y más baratas.
Donde sí que el usuario podrá observar un cambio notable es en el nuevo modelo de iMac. Su extrema delgadez sorprende a primera vista, haciendo que nos preguntemos cómo han sido capaces los ingenieros de introducir todos los componentes del ordenador dentro del mismo. Su precio también varía, y no de la mejor de las maneras, ya que el modelo de 21 pulgadas costará 1.379 euros frente a los poco más de 1.200 del modelo anterior.
El producto que Microsoft tenía preparado para el 26 de octubre ya estaba listo desde hacía bastante tiempo e incluso había sido probado por multitud de usuarios. Se trata del nuevo Windows 8, sistema operativo encargado de encandilar a usuarios de anteriores versiones para que se animen a dar el salto a esta última.
Se pondrán a la venta tres versiones de Windows 8: la simple, Windows 8 Professional y Windows 8 Enterprise. Los usuarios de versiones anteriores podrán actualizarse por 29,99 euros durante cierto tiempo a la versión Pro.
La nueva interfaz Modern UI está despertando diversidad de opiniones entre los que ya han probado Windows 8, pero será el tiempo el que diga si esta versión se asienta en el mercado o supone un "chasco" para Microsoft.
Los dos gigantes han hablado. Ahora es el turno de los usuarios.