La compra de Instagram por parte de Facebook se paraliza por el momento. La Federal Trade Comission se ha entrometido en la operación, pudiendo alargarse hasta incluso seis meses.
Google y Twitter han presionado bastante a la FTC para que investigue la compra. Consiguen así un tiempo de oro para que Facebook no pueda disfrutar de un servicio con tantos usuarios que le puede reportar grandes beneficios. No podrá "meterle mano" en ningún sentido hasta que se llegue a una resolución del caso. Mientras Google y Twitter intentarán quitarle su parte de pastel.
Todo esto ocurre poco antes de que Facebook salga a bolsa. Seguramente su idea era la de empezar por todo lo grande con la compra de un producto tan importante, pero tendrán que esperar a que se resuelva el caso.
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